Francisco, un autónomo cuyo negocio quebró en el contexto de la crisis, para intentar llevarlo adelante hipotecó el piso de su madre, donde reside actualmente con su mujer y sus dos hijos. La semana pasada se pidió a La Caixa que suspendiese la subasta, concediese la dación en pago y permitiese quedarse a la familia con un alquiler social. Al no obtener niguna respuesta clara y la negativa de parar la subasta se convocó la concentración que se ha desarrollado esta mañana.
Esta mañana unas treinta personas han acompañado a la familia a la oficina del juzgado, ante lo cual, la entidad financiera, la Caixa ha alegado un defecto de forma, contra su propia iniciativa de subasta, para paralizarla. Esto va ha conceder tres meses de alivio a la familia, en los cuales se volverá a intentar negociar y llegar a una solución satisfactoria.
Agradecer a to@s l@s compañer@s de las distintas asambleas y del barrio de San Pablo Santa Justa, por su apoyo y su lucha, demostrando una vez májuntos si podemos cambiar las cosas. ¡Enhorabuena a todos!